Viene el día con sus promesas. Le ayudamos a cumplirlas. Nos enganchamos a él con garantías, pero, en paralelo, con libertad. Nos tenemos. No estamos solos.
Resguardamos lo más noble. Nos subimos a un pedestal que nos sirve de noble objetivo. Nos premiamos. Hemos hallado tesoros que albergan un valor incalculable.
Nos expresamos con aspectos joviales que nos hacen vivir en la firmeza, con alegría. Nos hemos preparado para cuanto poseemos. Hemos cosechado. Nada nos parará.
Replicamos los intereses con lealtad. Nos escribimos. La belleza nos propone habitáculos singulares que nos endulzan y mejoran. Nos establecemos donde edificamos maravillas.
Las premisas de antaño nos llevan por lugares de semblanzas atractivas que nos localizan con perfiles de hermosura. Estamos estupendamente, somos positivos, y avanzamos.
Juan TOMÁS FRUTOS
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