Transformamos los lugares. Nos mudamos. Nos encontramos. Hemos ubicado los
elementos que nos parecían extraños.
Nos curamos. Hemos añadido
conceptos con los que entender lo que sucede. Nos morimos y resucitamos. Nos
desaparecemos.
Nos damos lo último. Nos
insertamos en otros procesos. Nos regalamos filtros. Hay más ruidos. Nos
consolidamos.
Regresamos para contextualizar
lo que fuimos, lo que podemos comprender. Nos damos más y más. Nos aireamos.
Nos contrastamos.
Nos pasamos. Nos dejamos ir.
Nos caemos y nos levantamos. Nos reportamos opciones. Hemos sido con buenos
motivos. Los volveremos a palpar.
Juan TOMÁS FRUTOS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario